Las ciencias se deben enseñar desde la etapa preescolar en el campo formativo correspondiente a Exploración y comprensión del mundo natural y social. Es de suma importancia educar a todas las personas y no solo a quienes en el futuro se dedicaran al estudio de las ciencias. Su enseñanza permitirá lo siguiente: 

  • El niño será capaz de comprender y explicar el mundo que le rodea, con los conocimientos que construya podrá tomar decisiones de manera informada y sobre todo responsable, tomando en cuenta las posibles consecuencias o repercusiones que pueden tener sus acciones. Logrará ser un adolescente y posteriormente un adulto que entienda asuntos de trascendencia personal o social importantes, por ejemplo: los efectos del cambio climático, los alimentos transgénicos, el uso de células madre, la salud, tecnología e incluso podrán detectar publicidad engañosa, como la de aquellos productos "mágicos" para bajar de peso o rejuvenecer. 
  • Desarrollar su pensamiento critico, seguir fomentando esa curiosidad que poseen desde muy pequeños, construir diversos conocimientos e hipótesis por medio de las actividades planteadas así como de la experimentación o contacto con la naturaleza. Ademas de formular preguntas sobre los sucesos que ocurren en su entorno. Todo lo anterior contribuirá a su creatividad, resolución de problemas, toma de decisiones y poner en juego sus habilidades, actitudes y valores, incrementando su autoestima. 
Los educadores deben asumir un gran compromiso, pues la enseñanza no solo implica conceptos y teorías, va mucho más allá. La ciencia se debe abordar desde 3 puntos: como posibilidad de educar para la vida y ciudadanía, como actividad humana y cultura, y en la sociedad del conocimiento. Sin dejar de lado que las actividades a realizar deben atender la diversidad de ritmos, estilos de aprendizaje y por supuesto de cultura.